Jutbas (disertaciones)
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"Revificación de las ciencias del Islam"
Obra Huyyatu Al-Islam Al-Gazali (Traducción, comentario y notas Sheij Alí Al-Husaini.)
Jutba 016
Decimonoveno vicio: "El error en la expresión"
Es necesario percatarse de mantener una extremada corrección en el sentido de lo que se dice, tener cuidado del descuido al respecto, en especial en lo que concierne a Allah y a sus Atributos. El ejemplo de esto es lo que la tradición cuenta del Profeta (BPDyC) que dijo: "Que ninguno de vosotros diga: 'esto es lo que Allah y yo quisimos', sino que diga: 'Esto es lo que Allah quiso y luego yo quise'. Esto se debe a que decir lo primero es asociatividad e igualación y es lo contrario de la veneración.
Ibrahim, un sufi, detestaba que una persona diga a otra: "Me amparo en Allah y en ti", y también: "Si no fuera por Allah y por Fulano", en cambio es posible decir: "Me amparo en Allah y luego en ti", y "Si no fuera por Allah y luego por fulano".
Se transmite de Ibn Abbas dijo: "Sin duda que alguno de vosotros asociará a Allah hasta que llegue a asociarlo con un perro diciendo: "Si no fuera por este, hubiésemos sido asaltados seguramente esta noche".
Omar narró que el Mensajero de Allah (BPDyC) dijo: "Allah, exaltado sea, os prohíbe totalmente que juréis por vuestros padres;" Y agregó Omar: "Por Allah nunca más juré así desde que lo oí". Y Abu Huraira contó que el Mensajero de Allah dijo: "Que ninguno de vosotros diga 'mi siervo' o 'mi sierva', porque todos vosotros sois siervos de Allah y todas vuestras mujeres son siervas de Allah, por el contrario que diga: 'mi doncel o criado' y 'mi doncella' o 'mi joven', a él y a ella y que no diga: 'Mi amo o dueño y señor (rabbi)', sino que por el contrario diga: 'Mi señor (saiidi)' o 'mi señora (saidati)' en el sentido de respeto porque todos vosotros sois siervos de Allah.
Y dijo (BPDyC): "No digáis al hipócrita 'mi señor (saiidi)' porque si él fuera señor, vuestro Señor se encolerizaría con vosotros, en consecuencia que el que habla se ajuste a un temor reverente y preservador y a un cuidado atento para estar a salvo del peligro".
Vigésimo vicio: "El inmiscuirse en la cuestión de los Atributos y de la Palabra de Allah, Exaltado Sea"
Es deber de la gente común dedicarse a las buenas obras, excepto que la curiosidad es algo atractivo al corazón. La persona común goza al inmiscuirse en el conocimiento por cuanto Satanás le hace fantasear que es uno de los sabios y de la élite y no deja de hacerle desear esto hasta que diga lo que constituye una impiedad aún sin saberlo. Todo el que pregunte por un conocimiento oculto y profundo, sin haber él alcanzado el grado del mismo es alguien denigrante y además de ello es un ser vulgar. En la tradición profética se dice: "El Mensajero de Allah (BPDyC) prohibió los dimes y diretes, despilfarrar la riqueza y abundar en preguntas impertinentes". Ual Hamdu lil-Lahi Rabbil alamin ua bihi nastain...
Siervos de Allah, roguemos a Allah en este Yumu'ah, el día en que fue creado Adán (P), el día en que fueron revelados los mensajes divinos, los libros, las escrituras, el día en que reaparecerá el Mahdí (P), el día en que se constituya el Juicio Final y es el día en que celebramos los musulmanes la congregación de la Ummah, la Comunidad mundial del Islam, en todos los lugares en este momento están elevando las oraciones del Yumu'ah o la oración del Yumu'ah o sea de la congregación y en cada punto del globo, en diferentes horarios al nuestro se reúnen los musulmanes con una sola intención, purificarse de todo mal y elevar al Señor sus oraciones y su súplica. Siervos de Allah aprovechemos esa fuerza espiritual que se genera en este día para agregarnos a ellos, para asociarnos, adherirnos a ellos y elevar nuestras súplicas y pedir a Allah todo aquello que desee nuestro corazón con sinceridad y pedirle sobre todo la disculpa, el perdón, es el día del perdón, cada Yumu'ah es un día de perdón para nosotros, debemos reconciliarnos con Allah Ta'ala porque él nunca se enoja con nosotros, nosotros nos revelamos contra El y entonces debemos observar nuestras obras de la semana y pedir a Allah perdón por todas ellas, Allah perdona, en este día se abren las puertas de los cielos y se cierran las del infierno para los creyentes y se abren las del infierno y se cierran las del cielo para los impíos. Siervos de Allah temamos a Allah con profunda reverencia y veneración y pidámosle en este día, en esta hora, en este momento la bendición, la misericordia y la indulgencia para nosotros los reunidos aquí en su nombre, en nombre del Profeta (BPDyC). Subhanna...
SEGUNDA JUTBAT
Luego siervos de Allah aquí presentes, hemos visto dos vicios que son los últimos de los vicios del habla mencionados en ese texto que estamos leyendo. El error de la correcta expresión y el otro es el inmiscuirse en la cuestión de los Atributos y de la palabra divina cuando no se tiene condiciones para hablar de ello. Y en el primer caso se trata de algo que cometemos muchas veces en el habla diaria debido a la forma de hablar habitual de toda la gente de la que aprendemos el idioma. Hay muchas incorrecciones en el idioma de la cual debemos corregirnos, expresiones que no condicen, no están, no se ajustan a una doctrina correcta acerca de Allah. Dijo el Profeta (BPDyC) por ejemplo: "Que ninguno de vosotros diga: 'Esto es lo que Allah y yo quisimos' sino que diga: 'Esto es lo que Allah quiso y luego yo quise'", o sea está corrigiendo el habla de su época pero se transmiten los errores muchas veces. El musulmán nunca dice: "Esto es lo que quise hacer", ni: "Haré aquello mañana", ni tampoco dice: "Fue por mi deseo", todas las acciones las atribuye a Allah como único agente, en eso consiste la unidad de las acciones, ver a las acciones como una, originándose en una fuente única que es Allah, inclusive cuando esas mismas acciones sean hechas por múltiples agentes que podemos, causas, o motores, digamos, motivaciones que se vinculan a la primera causa, pero si no fuera por la primera causa, sino fuera por el principio de todas las cosas, ninguna acción se produciría ni tendríamos ni fuerza ni poder como para realizarlas nosotros como seres humanos, ni el cosmos podría realizar ningún movimiento ni producir nada, por lo tanto todo querer en última instancia debe ser el querer de Allah para nosotros. Y dice el Sagrado Corán: "No digáis mañana realizaré esto", sino: "Si Allah lo quiere", todo querer debe ser el querer de Allah, porque de esa manera, teniendo esa conciencia reconocemos que es el único agente verdadero, y en la medida en que reconocemos que es el único agente no veremos contradicción y observaremos la realidad como un todo en el cual la única contradicción, o la única contrariedad somos nosotros mismos cuando realizamos malas acciones.
Muchas veces solemos decir: "Si no fuera por fulano me hubiese sucedido esto, fulano me salvó", y a veces no respecto de personas, sino de cosas como el dinero, decimos se salvó fulano porque hizo un buen negocio o me salvé", y le otorgamos a las personas y a las cosas un poder de decisión sobre acontecimientos que ellos mismos no tienen en absoluto, entonces se forma en nosotros la conciencia de depender del mundo, que es lo que Allah nos quiere evitar, exaltado sea, no depender del mundo sino depender de El. El que depende del mundo Allah hace que tema a todas las cosas y o es opresor o es oprimido y el que depende solamente de Allah, aún siendo oprimido está liberado, como ustedes saben muchas veces un mártir que padece una gran prueba por parte de los impíos muere alegre y liberado. Recuerdan a uno que fue tomado prisionero por Abu Sufián y que había sido un gran combatiente en las luchas del Islam y del cual Abu Sufián se quería vengar y entonces lo presionó para que renunciara al Profeta y le dice: "¿Y tu amigo ahora que puede hacer por ti?". Y entonces le respondió: "Si tu me castigas, si tú me condenas no será por tu voluntad, sino por la voluntad de Allah y seré mártir, pero si tú te abstienes de ello será una prueba en tu favor en el Día del Juicio y te librarás de muchas de tus faltas", y Abu Sufián que no era necio, no tan necio como parecía se acomodó a la situación, quizás viendo el futuro triunfo del Islam y lo liberó. Por eso es necesario evitar la referencia a las personas en todo lo que sea posible y referir todos los hechos de nuestra vida a Allah Ta'ala, Allah enseña la liberación y no la opresión.
Y dijo Ibn Abbas: "Sin duda que alguno de vosotros asociará a Allah hasta que llegue asociarlo con un perro, diciendo: "Si no fuera por éste (por el perro) hubiésemos sido asaltados seguramente esta noche". Fíjense que Ibn Abbas considera que inclusive un hecho que se produce a través de un animal es un hecho que debemos atribuir a Allah Ta'ala, a la voluntad de Allah Ta'ala. Hay gente que confía en un perro, no solamente confía sino que ama a los perros o a los gatos, bueno a los gatos es un poco más justificado, amar a un gatito, pobrecito, pero a un perro... amar a los animales por encima de las personas, a eso me refiero, amar a los perros, característicamente el impío ama a los perros, y como ustedes saben en todas las tradiciones el perro es un animal que representa lo negativo lo opuesto a lo espiritual y entonces a veces no se le permitía entrar en determinadas ciudades a los perros, por eso los cínicos se llamaban cínicos porque estaban a la puerta de los perros, donde se echaban los perros afuera de la ciudad y ellos se llamaban perros porque vivían como perros mas o menos y el cinismo es como la perrumbre, digamos, pero lo que quiero decir es que aman a los animales, a un animal más que a Allah Ta'ala, y entonces ahí hay asociatividad, en realidad uno diviniza lo que ama y lo considera superior, y por lo tanto si ama a algo más que a Allah Ta'ala, lo diviniza y lo considera superior a Allah Ta'ala.
Otra de las cosas transmitidas por Omar dice: "Allah, exaltado sea, os prohíbe totalmente que juréis por vuestros padres". Y siempre Omar agrega: "'Por Allah, nunca más juré así desde que lo oí". Siempre Omar se percata de las cosas después, lo mismo en la prohibición del alcohol, estaba tomando cuando se prohibió el alcohol y escuchó que se pregonaba en Medina la prohibición del alcohol y no lo creyó y tuvo que ir ante el Profeta (BPDyC) y preguntarle: "¿Es cierto?", como si no fuera cierto, como si Bilal pudiera pregonar algo que no fuera cierto, es cierto tal cosa y después que se lo dijo, si es cierto, claro es la Revelación de Allah, entonces desde hoy juro. Entonces vemos que el Profeta dijo que está prohibido jurar por los padres pero hay gente que jura por los padres. Yo he visto a musulmanes estimar más a sus padres que al Din y no musulmanes también o sea seguir lo que dicen los padres por encima de lo que dice Allah, no ser independientes de los padres por encima de lo que dice Allah, no ser independiente de los padres, seguir la tradición patricia y la tradición patricia normalmente es corrupta, es una tradición corrupta, no es la tradición de los Profetas, ni de los sabios de la sociedad que por lo general se corrompe. Y otro de los hadices del Profeta (BPDyC) es el que dice: "Que ninguno de vosotros diga: 'Mi siervo' o 'Mi sierva' abdi o ammati, son dos palabras muy diferentes, como vaca y toro, en árabe, siervo y sierva son como vaca y toro, en castellano, palabras diferentes, abdi, mi siervo, ammati, mi sierva, porque todos vosotros sois siervos de Allah y todas vuestras mujeres son siervas de Allah, por el contrario que diga: 'mi criado' 'mi doncel' y 'mi doncella', pensemos que en aquellas épocas había personas que trabajaban dentro de la casa ayudando a la familia y que existía la esclavitud, entonces al esclavo se lo llamaba siervo, abd, y pensemos que hoy mismo hay gente que habla de "la chica", por ejemplo, "de las sirvienta" y sirvienta viene de sierva. Está mal hablar y decir sirvienta, porque es sirvienta de Allah, decir "la persona que trabaja en casa", en última instancia decir "la mucama", "me atendió la mucama de fulano de tal", no "la sirvienta", ya ven que esto tiene que ver ¿o no tiene que ver? con los usos del lenguaje nuestro, a pesar de que los hadices proceden de hace mas de mil años o "mi joven", para el hombre y la mujer, "mozo" como cuando decimos "'mozo!", "tráigame un café", mozo, una persona puede decir mozo o doncel, la persona que trabaja en casa, el joven que trabaja en esta fábrica, el cadete, cosas así se pueden decir, pero decirle a un hombre que está trabajando "'mozo venga acá!" está mal ¿lo sabían ustedes? mozo, porque por lo general no es un mozo, no es un joven, es una persona mayor, entonces hay que decirle señor, por favor, tráigame tal cosa. Otros le dicen pish, en Uruguay el pish es terrible, porque se lo hacen a cualquiera. En el ómnibus no hay para tocar un timbre, se dice "pish" y el conductor mira quien le hizo así, le chistó, y bajan los tipos tomando mate. Entonces no hay que hacer esas cosas, está mal, hay que tratar de señor, saiied. Tampoco, bueno esto ya es mas viejo, decir "rabbi", antes se decía "rabbi" al patrón, digamos, se le decía rabbi, que quiere decir "mi señor", "dueño" o "amo", es más correcto decir amo, mi amo, como se dijo en castellano también ahora ya no hay más ese término, pero está el término patrón que también es pesado y es inadecuado. En realidad el patrón es el que domina todos los asuntos de uno, viene de "patter", de padre, entonces es el que tiene bajo su dominio los asuntos de uno y eso no se le puede atribuir a los humanos sino a Allah Ta'ala. Se puede decir, por el contrario "señor", "mi señor", "señor mío", "saiied" "sidi" o "saiida", señora, "saiidati", mi señora, como dijo el Profeta (BPDyC), excepto al hipócrita, al hipócrita ni se le dice saiied. Dice: "No digáis al hipócrita 'mi señor, saiidi', porque si él fuera señor, vuestro Señor se encolerizaría con vosotros".
El otro vicio es que la persona que no tiene condiciones, como para hablar de algo profundo se ponga a hablar de eso. Ayer tuvimos un caso, un señor que siempre viene a las conferencias y que es musulmán pero que habla cosas que no le conciernen y se mete en cosas que no comprende y cree que él puede hablar de todas las cosas, sin haberlas estudiado antes, entonces tengan cuidado con una actitud como la de esta persona o darle mucha atención a estas personas, porque estas personas mas bien hay que pararlas y decir, mire usted no lo sabe eso, usted lo que tiene que decir es tal cosa, una actitud de enseñanza hacia ellos porque sino se les hace un daño si se les escucha, son chapoteadores, como dijo... o sea van de lugar en lugar hablando cosas de las cuales no entienden. Y dice que todas las personas son inclinadas a hablar de cosas profundas y ocultas como si las supieran, pero que Satanás juega con ellos, maldígalo Allah, para hacerles creer que son sabios y que ya saben todas las cosas. Lógicamente en todos hay ignorancia, en todos, hasta los más sabios, excepto los Profetas, ignoran cosas, se dice de una persona que sabe en relación a los otros y nunca en relación a una sabiduría absoluta como sería la sabiduría de Allah, pero si no hubiese sabios, a los que llamamos sabios, uno de los Atributos de Allah estaría ausente de la humanidad que es el conocimiento y la sabiduría y es el Atributo más elevado, por eso la gente que conoce a través de Allah o que ostenta ese Atributo, esa gente es la élite o sea la clase dirigente, como se dice hoy, de una sociedad y no los corruptos que están en el gobierno o como clase dirigente en la ciencia, en las artes, en la técnica, en la empresa. Cada uno tendría que tener su lugar realmente, pero como todo está confuso, como dijo Discépolo, que hizo una filosofía de esta confusión actual, entonces ya no hay base. En árabe hay una expresión muy común y vulgar para la confusión que dice "daed, se perdió, abbasa", abbasa, es la basa de las cosas, se perdió la basa, ya no hay parámetros como dicen ahora, no hay fundamentos sobre los cuales, determinar que está bien y que está mal.
Y dice un hadiz: "El Mensajero de Allah (BPDyC) prohibió los dimes y diretes, despilfarrar la riqueza y abundar en preguntas impertinentes y todo esto lo pone como en un solo nivel, en una sola categoría, perder el tiempo diciendo "se dijo" o "se dice" o "se dirá", son los dimes y diretes, el paso de información inútil, como hay en la radio todos los días o en los diarios que no sirven para nada, ni benefician a nadie, que son puro chisme, despilfarran la riqueza es igual, es invertir en lo inútil, en uno invertir la palabra y en otro invertir la riqueza, que tanto puede ser riqueza espiritual como material, hay que interpretar en este párrafo en el sentido de un haber que alguien tiene. Y abundar en preguntas impertinentes, es decir que no le corresponde a uno preguntar y estar inquiriendo por ejemplo sobre cuestiones sobre las que uno no tiene la más mínima preparación como si nosotros ahora preguntáramos a un físico atómico preguntas muy profundas de su ciencia, sin la menor preparación de nuestra parte, eso comprendemos que no puede ser. Lo mismo en el sentido espiritual no hay que hablar de todo, hay que hablar de lo necesario y muchas veces eso mantiene un nivel muy general, uno no habla de lo más profundo, pero por respeto a eso más profundo y no porque no se deba hablar con alguien, siempre con alguien se puede hablar pero reservadamente, digamos, que los aspectos más profundos se reservan para la gente que lo entiende y los aspectos generales se pueden hablar con todos.
Sagrado Corán
Vamos a leer, insha Allah, el Sagrado Corán que dice lo siguiente: "Y Hemos dado a Abraham la Guía anteriormente, y conocíamos lo que había en él. Y he aquí que dijo a su padre y a su pueblo: '¿Que son todas estas representaciones ante las cuales os arrodilláis?'. Le respondieron: 'Encontramos a nuestros padres, a nuestros ancestros que las adoraban'. Replicó: 'Vosotros y vuestros padres, sin duda, estáis en un error manifiesto'. Le dijeron: '¿Has venido a nosotros con la verdad o eres, sin duda, uno de los detractores?' Contestó: 'Por el contrario vuestro Señor es el Señor de los cielos y de la tierra, el que los ha fundado y yo soy uno de los testigos de esto. 'Por Allah! voy a tramar contra vuestros ídolos (lo diría para sí mismo) luego que os apartéis de ellos'. Y entonces los destrozó, excepto al mayor de ellos, para que el pueblo se volviera hacia él o sea le pidiera cuentas. Se preguntaron entre sí: "¿Quien hizo esto con nuestros dioses? es por cierto de los más inicuos". Algunos respondieron: "Hemos escuchado de un joven que los mencionaba despectivamente, el cual se llama Ibrahim. Entonces pidieron: "Traedlo acá ante toda la gente para que ellos sean testigos (para que el pueblo sea testigo del juicio)", Le preguntaron: "¿Tú has hecho esto con nuestros dioses, Ibrahim?". Respondió: "No, lo hizo el mayor de ellos, éste, preguntadles a ellos (a los dioses si es que pueden pronunciarse, si es que pueden hablar". Entonces se volvieron a sí mismos, es decir entonces tomaron conciencia de sí mismos y dijeron: "Por cierto nosotros somos los inicuos, no él, él está hablando la verdad". Pero luego movieron sus cabezas, como comprendiendo la situación y dijeron: "Tú, ciertamente sabes que éstos no pueden hablar". Respondió Ibrahim: "¿Cómo es que adoráis fuera de Allah, aquello que no os beneficia en nada, ni os puede dañar? Estoy hastiado de vosotros y de cuanto adoráis fuera de Allah ¿Acaso no comprenderéis?". Bueno, vamos a llegar hasta ahí, después lo condenan a la hoguera. Veamos que dice Allah Ta'ala en estos pocos versículos. Recuerda a Ibrahim (P) y nos dice que le dio rush o sea rectitud, un sendero recto, una práctica correcta y que conocía cuanto había en él, es decir, le dio conocimientos a Ibrahim, interiores. Entonces él se enfrentó con la idolatría de su pueblo y les hizo una trampa, el pueblo se justificó con que adoraban y se prosternaban ante lo que habían encontrado que sus ancestros adoraban y se prosternaban, algo así como la doctrina de los patricios, siempre hay como una tradición, de padres a hijos, como la de la bandera o el escudo o el himno nacional, entonces él replica que el único señor es el de los cielos y de la tierra y piensa para sí, voy a hacerles una tramoya, una trampa, cuando se retiren del templo, entonces va y rompe a todos los ídolos excepto el mayor. Cuando vienen para juzgarlo dice: yo no lo hice, lo hizo el mayor de ellos. Fíjense que está mintiendo, ¿o no? A veces la mentira tiene una función, en realidad no decía del mayor, sino del dios de los dioses, del señor de los señores, del Señor, viene de la mano del Señor, El rompió los ídolos y dejó a uno y entonces los hace reflexionar con un hecho concreto, pregúntenle, ellos dicen a que estamos adorando, no podemos preguntar a estas imágenes, como adoramos a algo que es inferior a nosotros mismos, nosotros hablamos, nosotros comprendemos, pero esta materia inerme no puede hacer nada de eso, nosotros le damos valor, no ellos tienen valor por sí mismos, y muchas veces nos encontramos con cristianos que justifican su adoración de las imágenes diciendo, no es que no lo adoramos por sí mismo, la adoramos por lo que representan. ¿Quien pone la representación sino uno? Y si el la pone en algo bajo, como la materia inerme ¿no es responsable y culpable de eso? O es suficiente decir que yo me represento en una cosa material al Señor para decir que esa cosa material es necesaria, no, lo que yo estoy poniendo es lo necesario, la percepción del Señor es necesaria, pero esa percepción no debe pasar por medios inferiores a mí mismo por lo menos, como la materia inerme, ojo con ese argumento porque es muy habitual entre la gente que no pudo superar la idolatría. Pero después se dieron cuenta de la situación cuando dice el Sagrado Corán: ¿Y movieron sus cabezas después de haber reconocido y dicho, bueno estamos en el error, pero ahora que podemos decir, entonces dicen, bueno, como cuando uno reflexiona y dice bueno, me metí en el lío pero ahora yo no puedo salir de él porque tendría que desarmar toda la sociedad, los sacerdotes tendrían que renunciar a sus oropeles y a las riquezas como en la actualidad. Los que aprovechan de la falsa devoción tendrían que renunciar a ella, los poderes que se han constituido gracias a ella tendrían que reconocer que son falsas todas esas devociones, está armado un sistema en base a eso, o en base a que eso es un componente importante, hubo un Papa que fue muerto últimamente porque decía que iba a renovar la iglesia y entonces afirman su orden social corrupto antes de reconocer la verdad y el les replica: ¿cómo podéis adorar aquello que no os beneficia ni os perjudica?, y ahí da una definición de lo que debemos adorar es un poder verdadero que nos pueda beneficiar o cuya desobediencia o la desobediencia a ese poder pueda perjudicarnos y ese poder únicamente es Allah Ta'ala el Señor de los cielos y de la tierra.
Siervos de Allah, exaltemos a Allah, y bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos en este día, en este momento agradeciendo previamente a Allah y pidiéndole la indulgencia, que nos otorgue la bendición y las gracias, que nos de protección y seguridad, que nos otorgue la provisión espiritual y material para todos nuestros días que nos de una buena muerte, que nos ayude en nuestros asuntos, que nos auxilie, que no nos abandone a nuestras propias fuerzas, que nos otorgue fuerza de su fuerza en la medida que a El le complazca y que nos beneficie. Siervos de Allah roguemos a Allah para el perdón de nuestros pecados, yo ruego por el perdón de mis pecados y los vuestros. Bendigamos al Profeta (BPDyC). Subhanna...
JUTBAT 17
La censura, la ira, el rencor y la envidia
Luego, siervos de Allah aquí presentes, comenzamos con el capítulo de "La censura, la ira, el rencor y la envidia."
La ira es en verdad como un ascua de fuego tomada de "el Fuego de Allah encendido, ardiente, que aparece en los adentros." (104:6 y 7), y está asentada en los repliegues del corazón, como reposa la brasa debajo de las cenizas. La que la extrae de allí es la soberbia oculta en el corazón de todo opresor rebelde, tal como produce la piedra fuego al ser rozada con el pedernal.
Para los que tienen visión espiritual a la luz de la certidumbre, se les hace manifiesto que el hombre proyecta un nexo hacia Satanás el maldito. Por lo tanto, el que esté perturbado y excitado por el fuego de la ira, se habrá fortalecido en él ese nexo con Satanás, por lo que éste dice (en el Sagrado Corán): "Me haz creado de fuego y lo haz creado (a Adán) de tierra" (7:2) La modalidad de la tierra es el reposo y la reverencia, y la modalidad del fuego es la agitación, el movimiento y la confusión.
Como consecuencias de la ira aparece el rencor y la envidia, y por ambos es aniquilado quien es aniquilado, y se corrompe quien se corrompe, fluyendo ambos de una partícula en el interior del hombre que "si se perfecciona, perfecciona todo su ser" (de una tradición profética). Y en tanto el rencor, la envidia y la ira tienen esta importancia de conducir al siervo a las ocasiones de reproche y reconvención, '¡cuán necesitado está de conocer aquello que lo hace caer en la reconvención y en la maldad! para precaverse de ello, evitarlo y expulsarlo de su corazón, si estuviera allí, de modo de anularlo. He aquí que vamos a evidenciar algo al respecto, con la ayuda de Allah.
Justificación de la censura de la ira
Dice Allah, exaltado sea: "He aquí que los impíos, tienen el fanatismo en su corazón, el fanatismo de la ignorancia. Pero Allah manifestó el sosiego a Su Mensajero (Muhammad) y a los creyentes" (48:26). Aquí Allah censura a los impíos por lo que ellos manifiestan del fanatismo que procede de la ira, y elogia a los creyentes por haber recibido ellos el sosiego. Se tiene por seguro que un hombre se dirigió al Mensajero (BPDyC) pidiéndole: "¡Ordéname algo a hacer, pero sé módico!" (Es decir, no dándole mucho a hacer). Respondió: "No te encolerices". El hombre reiteró su pedido, le respondió: "No te encolerices". Y cierta vez preguntó el Profeta (BPDyC) a sus gentes: "¿A qué llamáis campeón vosotros?". Le respondieron: "Al que no lo abaten los hombres". Contestó: "No es este el héroe, sino que por el contrario, héroe es aquel que domina su alma en el momento de la ira",
Yafar Sadiq (P.) dijo: "La ira es la llave de todo mal". Y algunos de los auxiliares del Profeta (BPDyC) de Medina, la complacencia de Allah sea con ellos, decían: "El principio de la cólera es el rencor, y su capital es la ira", el que se conforma con la ignorancia estará exento de templanza, pero la templanza es un embellecimiento y un beneficio, y la ignorancia es fealdad y perjuicio". "abstenerse de responder a un colérico es su respuesta".
Dijo Al-Hasan Al-Basri, el discípulo de Alí (P.) y de Al-Hasan (P.): "Las señales del musulmán son la fuerza en Din (o sea con buena vida), rigor con dulzura, fe con certidumbre, conocimiento con templanza, perfeccionismo con amabilidad, favor (o generosidad) con justicia, economía con autosuficiencia, decoro y decencia ante la indigencia, caridad e indulgencia con paciencia ante las adversidades. No lo vence la ira, ni lo somete el fanatismo, ni lo domina la pasión, ni lo envilece barriga llena, ni lo doblega la codicia, y su intención no se quiebra. Auxilia al oprimido, es misericordioso con el débil, no es avaro, ni dilapidador, ni derrocha ni escatima. Perdona cuando le es hecha injusticia y disculpa al ignorante. Su ego en él está en aprietos, y la gente con él está en desahogo.
Ual Hamdu lillahi Rabbil Alamin ua bihi nastaín... Siervos de Allah, exaltemos a Allah, el Primero y el Último, el Manifiesto y el Oculto. El Primero sin principios que lo precedan, el Último sin posteriores que lo siga. Creó todas las cosas sin antecedente alguno, y manifestó la Primera Luz la Cual constituye Su Trono y Su Rostro, (BPDyC). Creó a los elegidos de la luz, y creó a los hombres de la luz y de una luz menor. El Señor de los Cielos y de la tierra, que reunirá a la humanidad ante Su Tribunal, para ser juzgadas todas las obras, serán recompensados los justos y castigados los opresores.
Siervos de Allah, exaltemos a Allah, alabado es en la tierra y en los cielos, y El es Allah en los cielos y en la tierra. El ejemplo de Allah es la luz que da existencia a todas las cosas y por la cual son visibles y conocibles todas las realidades. Alabemos a Allah y pidámosle la Indulgencia, la Misericordia, el Auxilio en todas nuestras situaciones, la Protección, el aumento de nuestra capacidad para Su Luz y Su Generosidad, el reconocimiento en nuestro interior de Su Presencia, la inspiración de nuestros actos y de nuestras palabras, y la inspiración del agradecimiento a El de la mejor forma. Pidamos a Allah, siervos de Allah, que nos otorgue la mejor devoción, y que nos enseñe la forma mejor de devocionar. Todo esto por la intercesión del Profeta (BPDyC) de quien testimoniamos su misión y su categoría. Siervos de Allah, exalten a Allah, bendigan al Profeta (BPDyC) y aprovechen este día, el día de la congregación, en que son abiertas las puertas de los cielos para los justos y las puertas de los infiernos para los inicuos, y en EL que Allah responde al ruego de Su siervo cuando se dirige a El con una intención pura y pide aquello que realmente complace a Allah y perfecciona al siervo.
Siervos de Allah no olviden de bendecir al Profeta antes, durante, y después de sus súplicas, porque por él se abren las puertas de los cielos y es concedida la súplica y es concedida la Misericordia de Allah Ta'ala. Siervos de Allah exaltemos a Allah, bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidámosle para nuestra yama'ah que sea engrandecida, que sea perfeccionada en todos sus aspectos y que a cada uno de sus miembros les sea asegurado el sustento material en este mundo para no pasar por la denigración de estar bajo el mando, bajo el rigor de los injustos de la tierra. Pidámosle a Allah de su abundante provisión, de su riqueza inmensa, la provisión abundante para nuestra vida y pidámosle a Allah el perdón, la indulgencia, la remisión, la disculpa, que se apiade de nosotros el día en que muramos, el día en que debamos comparecer ante El. Bendigamos al Profeta (BPDyC), Allah ordena el bien y la justicia y prohíbe el mal, la rebeldía y la corrupción. Subhanna...
SEGUNDA JUTBAT
Luego siervos de Allah aquí presentes, hemos mencionado algo sobre la ira, la cual es comparada constantemente en el Islam con un fuego, un ascua, una brasa que hay en nuestro interior y de la cual salen nuestros actos más imprudentes y por la cual podríamos ser condenados por Allah Ta'ala si no media el arrepentimiento y la rectificación. La ira la experimentamos todos como una brasa, como un fuego, como una fuerza incontrolable dentro de nosotros y su remedio seguramente es el autodominio. En la vida espiritual el autodominio precede al auto conocimiento, quien no vence la ira y la fuerza de la pasión no llega realmente al auto conocimiento.
En una figura muy notable, muy concreta también el texto nos dice que es como una llama que está reposando debajo de las cenizas y que es la soberbia del hombre la que lo incita a la ira, la que agita su ira y lo hace sacudir con una fuerza incontrolable que nace de sí y que no sabe dominar y esa fuerza sin duda está vinculada con Satanás, el maldito, quien influye para que en nosotros se agiten las pasiones y cometamos imprudencias inclusive grandes crímenes, como quitar la vida a otra persona en un momento de ira. La ira es la expresión extrema de la pasión del alma y cuando el alma se apasiona injustamente por algo, cuando se fanatiza y se excede de sus límites que la mantienen en el bien, se perjudica a sí misma. Todo acto de ira es un acto que va contra el bien de uno mismo, que destruye nuestra interioridad, que nos abate. Por eso la ira nos trae el amargor del desequilibrio, del estupor, de la sorpresa de vernos a nosotros mismos en un aspecto que ignorábamos, excepto que seamos iracundos por naturaleza y con tanta frecuencia que no nos demos cuenta de cual es nuestra verdadera realidad, que esa realidad esté distorsionada por la ira en forma continúa. La soberbia está vinculada a la ira y la soberbia es la cualidad de Satanás que cuando fue creado dijo "Yo soy mejor que él (que Adán), a mí me creaste de incandescencia y a él lo creaste de la tierra". Entonces sabemos que la ira, como procedente de Satanás se agita en nosotros como el fuego y sabemos que el estado de reposo, de humildad y de ahí viene humus, tierra, o humildad viene de humus, mejor dicho, que es igual al de la tierra, que soporta, que es paciente, pero que da todo tipo de fruto y da todo tipo de sustento y crea la vida que hay sobre la tierra y vinculada a la ira seguramente, estas dos otras grandes falencias del alma humana, el rencor y la envidia. El rencor es muy a fin a la ira en el sentido que es como el subproducto de la ira que queda impregnando el alma cuando alguien no sabe ser tolerante, no sabe perdonar, no tiene amplitud de alma como para soportar contradicciones, digamos así, e inclusive ofensas e inclusive perjuicios, e inclusive golpes o ataques. Los Profetas con ellos sea la Bendición y la Paz y la Descendencia de Muhammad soportaron todo eso, el insulto, la agresión directa, la maledicencia, la difamación, el odio, en fin, de sus contemporáneos. Muhammad (BPDyC) fue atacado continuamente durante trece años, podríamos descontar tres, que fueron el periodo de interrupción de la revelación, los primeros tres y después cuando hizo pública su misión comenzó a ser atacado sistemáticamente y no solamente atacado, sino que eran muertos, eran asesinados, sus seguidores y su esposa Jadiyah, la Paz sea con ella, murió debido a la persecución, a las consecuencias de la persecución, digamos así, lo mismo que su tío y otros muchos de los musulmanes que morían torturados y así el resto de los Profetas, con ellos sea la Paz, piensen en Jeremías también, con él sea la Paz. Pero ellos no respondieron con la ira, ni tuvieron rencor en su corazón para los seres. Hay tres vicios máximos del alma humana que se manifestaron en un nivel metafísico y de los cuales, se ramifican todo el resto de los vicios, como ustedes saben son la soberbia, la codicia o avaricia y la envidia. La soberbia tiene que ver más con el conocimiento y con la categoría espiritual de los seres y es una deficiencia satánica en el alma de los hombres. La codicia o avaricia tiene más que ver con la posesión de cosas, con algo externo al hombre, pero que lo privilegia sobre el resto de los seres y a través de esa posición obtiene poder y a través del poder somete al resto de los hombres. Y la envidia es el más bajo y deleznable de los vicios del alma humana, que consiste en querer poseer lo que otro posee aún despojándolo o quererlo poseer por sí mismo sin que otro lo posea. Y como ustedes saben estos tres vicios proceden de tres virtudes o de tres manifestaciones superiores del alma humana que son la presencia de Allah y la grandeza del alma, que se desvía en la soberbia. La búsqueda del mayor bien y la felicidad que se desvía en la codicia y avaricia o se degrada en la codicia y avaricia y por fin la unidad con Allah que se degrada en la envidia, porque la envidia es la búsqueda de la unidad de sí mismo con la cosa que se envidia y aquí entra también la ira como producida por la soberbia, manifestada en el rencor en forma permanente y activa a través de la envidia, la ira une esos tres vicios, digamos que es la fuerza activa de todos los vicios del alma que desbordan y perjudican al mismo ser humano que la padece. Dice Allah Ta'ala, exaltado sea, en el Sagrado Corán: "He aquí que los impíos tienen fanatismo en su corazón, el fanatismo de la ignorancia, pero Allah manifestó el sosiego en su Mensajero y en los creyentes". Allah dice que el fanatismo es una forma de la ira y que el sosiego es una forma de la paciencia y elogia a los creyentes y denigra a los impíos porque manifiestan esas dos cosas contradictorias, cada uno de ellos. Y cuando fue preguntado el Profeta (BPDyC) sobre una acción módica que pudiera hacer alguien le dijo: "No te encolerices, no te enfurezcas" y el hombre volvió a pedirle que le ordene una acción módica y le dijo: "No te enfurezcas". Y el preguntó cierta vez a una gente: "¿A quién llamáis héroe entre vosotros?". Le respondieron: "Al que no lo abaten los hombres", es decir el héroe es aquél que puede vencer a los demás y no ser vencido. El contestó: "No es esto en verdad, sino que por el contrario, el héroe es el que puede dominar su alma en el momento de la ira". Yafar Sadiq (P.), el sexto Imam dijo: "La ira es la llave de todos los males". Y un discípulo de Ali (P.), Al Hasan Al-Basri, uno de los principales maestros del Tassauff y el eslabón directo con Ali en las líneas del Tassauuf, describió al musulmán de esta manera notable, extraordinaria: "Entre los signos del musulmán está la fuerza con Din", es vigoroso, pero cumple el Din, al-qua fi Din, la fuerza en el Din, el rigor con dulzura, ser riguroso pero con dulzura, es decir no imponer a los demás más allá de su posibilidad y de su capacidad y no imponerse a sí mismo algo que está por encima de su fuerza pero no dejar de imponerse aquello que está dentro de sus posibilidades. La fe con certidumbre, el grado de certidumbre es superior al grado de fe, el que obtiene el estado de Islam, que es el primer estado, está dirigido a obtener el grado de imán, de fe, que es el segundo grado y el que obtiene el grado de Imán, de fe, está dirigido a obtener el grado de Ihsan o certidumbre, como tercero y completo grado. El conocimiento con templanza, no un conocimiento acompañado de pasiones, de concupiscencia, de corrupción, como vemos hoy en el "intelectual tipo", sino un conocimiento acompañado de templanza, la templanza es el medio entre los extremos, en cuanto a las pasiones. Perfeccionismo con amabilidad, perfeccionismo, buscar la perfección, buscar la precisión, buscar la justeza, la corrección propia pero con amabilidad y aplicarla, digamos, a quienes nos rodean, pero con amabilidad, no con opresión, no con soberbia, no con exigencias, si uno quiere ser perfecto, primero que se mire a sí mismo. La generosidad o el favor con justicia, no dar a tontas y a locas, sino dar como corresponde y a quien corresponde, la finalidad con autosuficiencia, al qasan fidinna, es decir buscar por ejemplo el provecho en la vida, a eso se llama finalidad acá, buscar un objetivo material, puede ser, buscar un objetivo espiritual o ideal pero con autosuficiencia, con independencia de ánimo, no siendo sometido por eso que buscamos en la vida como un perro que está detrás de un hueso, sino sabiendo renunciar a nuestras apetencias cuando ello corresponda, con pasividad ante las deficiencias, también se puede decir falencias, dice, nosotros preferimos compasividad ante las deficiencias, las deficiencias ajenas y las deficiencias propias, caridad e indulgencia ante el compañero, paciencia ante la adversidad, no lo vence la ira, ni lo somete el fanatismo, ni lo domina la pasión, ni lo doblega la codicia y su intención no se quiebra. La intención es la parte más vital de la vida espiritual, la intención, la intención pura, la intención recta que es como la palabra Sea divina. Auxilia al oprimido, al desgraciado y hace misericordia del débil, no es avaro ni dilapidador, ni derrocha, ni escatima. Es indulgente con quien lo oprime o le hace injusticia y disculpa al ignorante. Su ego en él está en aprietos, porque combate contra su ego y la gente a su respecto está desahogada, tranquila, es decir no espera ningún mal de él sino que por el contrario espera el auxilio y la ayuda.
Siervos de Allah, exaltemos a Allah y bendigamos al Profeta (BPDyC) y hagamos una súplica en este momento, en esta hora, en este día, en que muchas de las comunidades musulmanas islámicas, en todo el mundo se congregan para este tipo de oración y elevan el rezo y la súplica a su Señor por el bienestar, el perfeccionamiento, la paz para la comunidad de todos los musulmanes en el mundo para que sean derrotados sus opresores, para que huyan en derrota quienes los agreden, para que Palestina sea liberada del yugo opresor, para que el pueblo palestino islámico consiga la libertad, la paz en su tierra, para que Allah Ta'ala de firmeza a los corazones de los combatientes contra la opresión sionista, para que Allah Ta'ala expulse a los opresores de Palestina, por la fuerza de los corazones de los creyentes, para que Allah imponga la paz a donde hay hoy persecución y asesinato, genocidio para que Allah Ta'ala nos expanda los corazones para la comprensión de las realidades sutiles que ha manifestado en este mundo. Allahumma te pedimos en este día, en esta hora, que bendigas, des la paz y las gracias a Muhammad y a su Descendencia, que nos des la bendición, la misericordia, la indulgencia, la protección, que nos des sabiduría, que nos hagas conocernos a nosotros mismos, que alejes de nosotros toda ignorancia que alejes toda ignorancia de los miembros de nuestra comunidad, de que vean la realidad tal cual es, como dijo el Profeta (BPDyC): "Muéstrame la realidad tal cual es". Siervos de Allah, exaltemos a Allah y bendigamos al Profeta (BPDyC) y por su intercesión pidamos a Allah Ta'ala que nos provea del cielo y de la tierra y de un lugar desconocido como dice el Sagrado Corán, que nos provea los bienes espirituales y los materiales que nos provea generosamente, abundantemente de su provisión inmensa.
Siervos de Allah, bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos por los pobres de la comunidad de los musulmanes, por los que están perseguidos, por los sedientos, por los desarrapados, por los enfermos, por los que sienten dolor, por los angustiados, por los que están en la ignorancia, por los que se desvían hacia la corrupción, por los que toman el camino del error de la comunidad del Profeta (BPDyC), que Allah los auxilie, les de aquello que ellos necesitan para alcanzar su complacencia, en especial buenos conductores que les enseñen y los saquen de la ignorancia y del error.
Siervos de Allah bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos para nuestro país la bendición, la misericordia, la indulgencia y la protección para el pueblo que Allah Ta'ala lo dirija hacia el Islam, que lo vuelva hacia el Islam que vuelva a los corazones con simpatía hacia el Islam, que islamice a su pueblo.
Siervos de Allah, roguemos a Allah exaltando a Allah y bendiciendo al Profeta (BPDyC) para nosotros, para nuestras familias, para nuestra descendencia, para nuestros progenitores, para nuestros ascendientes y para todos los que nos rodean, pidámosle la misericordia, la bendición, la indulgencia, la protección, la provisión, el conocimiento, la sabiduría, para nuestras almas en el momento de la muerte, pidámosle el perdón, la indulgencia, la remisión de todos nuestros pecados, el perfeccionamiento de nuestra luz, pidámosle a Allah Ta'ala por nuestras almas, exaltado sea, por la intercesión del Profeta (BPDyC) que cuando seamos reunidos ante El nos ponga a su sombra, que nos rodee con su luz y que sean perdonados todos nuestros pecados y perfeccionado nuestro ser junto con los creyentes que están con el Profeta (BPDyC) y marchan a su luz y que aquellos que tienen vínculos con nosotros sean conducidos hacia esas verdades.
Siervos de Allah, pidámosle a Allah, exaltado sea, por la bendición del Profeta (BPDyC) que nos inspire en nuestras palabras y en nuestros hechos, que nos pacifique nuestros corazones, que asiente nuestros pasos en el camino de la fe, que nos de los grados espirituales superiores y que no nos abandone en ninguna circunstancia, ni nos abandone a nuestras fuerzas, sino que nos de fuerza de Su Fuerza y poder de Su Poder y que nos de el triunfo sobre los opresores, en principio sobre el alma que nos oprime, el ego, las tendencias bajas, las maldades de nuestra propia alma. Siervos de Allah pidan cada uno de ustedes el perdón por sus pecados, por sus errores, por sus faltas, por su soberbia, por su codicia, por su envidia y todos los sentimientos que hayan experimentado sus almas y que son denigrantes para ella, para su grandeza, para su luz, para la presencia de Allah en ella y para la unidad con Allah. Pidan la purificación, la buena intención, los buenos pensamientos, pidan todo aquello en este día mas propicio de la semana y en momento más propicio del día, pidan a Allah Ta'ala todo ello y aquello que sus corazones guardan íntimamente y manifiesten con sinceridad ante Allah un diálogo, aunque sea pequeño, aunque sea corto, en que se sinceren con Él y abran su alma a El. No teman del mundo ni teman de los opresores, sea Satanás o sea su propio ego, teman solamente de Allah y a El manifiesten todas sus pesares, todas sus angustias, todas sus inquietudes y pídanle todas sus cosas porque el que une su vida material y espiritual a la súplica a Allah ese es el que recibe, ese es el que desiste de su propia voluntad para dejar a la voluntad de Allah y a la elección de Allah su destino.
Siervos de Allah pidan a Allah por el Murshid y por la Yama', así como invocan al Profeta y al Imam de la época, con ellos sea la bendición y la paz, lo deben invocar también, el bien, la misericordia, la indulgencia para aquel que los guía en el camino espiritual y así acrecer en unidad con él y acrecer en purificación y en conocimiento.
Siervos de Allah, bendigamos al Profeta (BPDyC) y con los Profetas que lo antecedieron y pidámosle para esta reunión nuestra que Allah nos abra las -puertas de Su Misericordia, Su Indulgencia, Su Bendición y Sus Conocimientos. Ual Hamdu lil-Lahi Rabbil Alamin ua bihi nastain.. Subhana...
JUTBAT 18
Los grados de iracundia de las personas
Sabe que la potencia de la ira tiene por asiento el corazón, y su significado es que hierva la sangre del corazón y que ella se disperse por las venas, y se eleve a lo más alto del cuerpo, como se eleva el fuego, o el agua que hierve en una vasija. Por ello es por lo que se destaca en el rostro, y éste se enrojece, como también los ojos. Y la piel, debido a su transparencia, transluce el color rojo de la sangre que está debajo de ella, como el vidrio transluce el color que tiene:
Luego, respecto de esta potencia la gente está en tres grados: los que son deficientes en ella, los que en ella se exceden, y los equilibrados, justos.
En cuanto a la deficiencia consiste en la falta de esta potencia o en su debilidad, y ello es reprensible. Es aquel del que se dice que no tiene agallas. Es por eso que Al-Shaf'i, la Misericordia de Allah sea con él, dijo: "El que sea encolerizado y no se encolerice, es un asno". Porque el que no tiene en absoluto la potencia de la ira y del coraje es defectuosa. En la tradición profética narra Yabir, la Misericordia de Allah sea con él, lo siguiente: "Cuando el Mensajero de Allah (BPDyC) disertaba enrojecían sus ojos, elevaba su voz, y se intensificaba su enojo"; y en otra tradición hay un agregado que dice: "y era como el arengador de un ejército,..."
Allah, exaltado sea, describe a los compañeros del Profeta (BPDyC) atribuyéndoles tenacidad e ira, al decir: "Tenaces con los impíos" (48:29). Y ordena a Su Profeta (BPDyC): "¡Combate contra los impíos y los hipócritas y se riguroso con ellos!" (66:9), siendo que la tenacidad y el rigor son sólo signos de la dureza del enojo y de la ira.
En cuanto al exceso en este atributo, es que él predomine hasta el punto de quedar al margen del gobierno del intelecto y de la práctica correcta (Din), desobedeciendo a ambos. Entonces no perdura en el hombre ni reflexión, ni pensamiento, ni libre elección, sino que por el contrario se transforma en alguien sometido. Y entre los signos externos de tal cólera están el cambio de color, la exagerada agitación de las extremidades, y el que las acciones queden al margen de toda norma y de toda disposición. También está la turbación en los movimientos y en las palabras, hasta el punto de que puede aparecer espuma en las comisuras de la boca, y enrojecerse la mirada, dilatarse las fosas nasales, y trastornarse la figura. Si el colérico pudiera ver, cuando está en ese estado, lo horrible de su imagen, cesaría de enfurecerse por vergüenza de su pavorosa voz y lo trastornado de su figura.
Pero lo atroz de lo que oculta es más horrible aún que lo que manifiesta, porque en verdad lo exterior es la marca de lo interior. Así, únicamente es porque primero se afeó su imagen interior, que luego se extendió su atrocidad a lo exterior. La modificación exterior no es más que el fruto de la modificación interior: ¡Compara, pues, un fruto con el otro! Estos son, entonces, los signos externos en el cuerpo.
Respecto de los signos de la ira en la palabra, son el emprenderla a los insultos, y con las palabras obscenas que avergüenzan al que tiene juicio. Pero también avergüenzan al que las dijo cuando la ira se aparta de él. Todo ello se produce alterando la gramática, y perturbando la dicción.
Respecto de los signos de la ira en los miembros del cuerpo, son la agresión, la violencia, destrozar, matar, o herir cuando ello es posible. Puede llegar a destrozar su propia vestimenta, a golpearse a sí mismo, o golpear el piso con sus manos, e incluso puede adolecer una especie de desmayo, o llegar a golpear a las cosas inanimadas y a los animales, o a insultar a los animales, o a patear a una bestia si esta lo hubiese golpeado, enfrentándola así como si fuera un enajenado.
En cuanto a sus signos respecto del corazón son el rencor, la envidia, el guardar maldad, el alegrarse del mal ajeno y entristecerse por su alegría, el empeño en divulgar los secretos y desvelar las intimidades, el burlarse de otros, y demás maldades por el estilo. Tales son los frutos de la ira excesiva. Ual Hamdu lil-Lahi Rabbil Alamin ua bihi nastain...
Siervos de Allah, rueguen a Allah en este día de Yumu'ah, yo ruego por el perdón de mis pecados y los vuestros.
SEGUNDA JUTBAT
Siervos de Allah testimoniemos que no hay divino sino Allah y que Muhammad es Su Siervo y Mensajero, con él sea la Bendición y la Paz y con su Descendencia purificada. Y luego reflexionemos sobre la ira que siempre se asocia al ejemplo del fuego. Hemos visto en una parte que decía que es como un ascua, es decir como una brasa que está debajo de las cenizas, y también que es como un hervor de la sangre que se dispersa por las venas, desde el corazón, o como el fuego que se eleva, o como el agua que hierve en una vasija. Es decir, es todo estado de extremo calor que se produce en el ser, tanto por una causa que puede ser buena como mala, que puede ser benéfica como puede ser maléfica. Por lo general es mala.
La lectura nos enseña que hay tres grados de ira, como en todas las virtudes, partiendo del hecho de que ella puede ser una virtud, la deficiencia, el exceso y el justo equilibrio. Al que no tiene en absoluto enojo ni ira se lo compara con animal silvestre pasivo, y decía As-Shaf'i, la Misericordia sea con él, el mentor de uno de los métodos sunnitas de práctica del Islam: "el que sea encolerizado y no se encolerice, es un asno". Porque de la ira nace la valentía, el coraje, el arrojo, y cuando es bien conducida lleva, por ejemplo, al martirio, pero cuando es mal conducida lleva al daño propio y ajeno, a la opresión, a la maldad. Por cuando uno se enoja deben dejarse de lado motivos de tipo personal, en todo lo que sea posible, es decir una persona pueda entrar en ira y enojo, ser encolerizado, por cosas objetivas, que Allah detesta, cosas que causan repulsión moral o sensación de injusticia. Debemos rechazar la injusticia, en ese caso la ira y el enojo son benéficos. Como dice una tradición: "Cuando el Mensajero de Allah (BPDyC) disertaba, enrojecían sus ojos, elevaba su voz y se intensificaba su enojo". Y se agrega en otra versión de esta misma tradición: "Y era como el arengador de un ejército", en el sentido de que hablaba de lo bueno y de lo malo que Allah había evidenciado a los hombres y cuando citaba lo malo, la hipocresía, por ejemplo, la injusticia, la maldad, la violencia, entonces elevaba su voz, y era como que asumía la culpa de su pueblo. Como dice el Antiguo Testamento, los Profetas cargan con la culpa de sus pueblos, en el sentido de que son concientes del mal que hay en el alma de su pueblo, no en el sentido que después derivó en el cristianismo romano de que cargaban con la culpa ajena. Y dice el Sagrado Corán sobre los compañeros del Profeta (BPDyC): "Tenaces con los impíos" (48:29) Y le es ordenado en el Sagrado Corán al Profeta (BPDyC): "Combate contra los impíos y los hipócritas y sé riguroso con ellos" (66:9). Todo esto no puede más que justificar la ira y el enojo, en las ocasiones correctas en que ellos son buenos para los hombres.
En cuanto a los desvíos de esta potencia o virtud, está el exceso, como también está el defecto. Algo sobre el exceso vamos a decir ahora. Se cae en el exceso cuando la ira o el enojo predominan sobre el alma, hasta el punto que no cumple con aquello que ordena Allah, la práctica correcta, los actos morales, la justicia, el bien, ni se ajusta a lo que le dice la razón, el intelecto, sino que rompe con ambos y sigue a su pasión. En ese momento el hombre no encuentra que se domina a sí mismo, sino que es dominado por una fuerza externa, una fuerza satánica. Entonces no le queda ni reflexión ni libre elección alguna. Esto lo podemos certificar porque la persona tiene determinados signos externos que nos dicen que ha caído en ese estado. Uno puede enojarse, elevar la voz, o enrojecer su rostro, como sucedía con el Profeta (BPDyC), pero lo que nunca debe hacer es lo que vamos a mencionar como signos externos de la ira, porque está denotando que la fuerza satánica lo ha dominado. Por el contrario, aquel que en el momento del enojo, se auto domina, ese es el que ejerce la ira como debe ser ejercida, y la conduce hacia un beneficio, hacia el bien. Por ejemplo, entre los signos externos está la exagerada agitación de los miembros, la gesticulación, inclusive la perturbación de todos los miembros, tanto del rostro como de las extremidades. La acción que está realizando la persona no se ajusta a ninguna forma disciplinada, ningún sistema, ningún método, sino que actúa impulsado como por una fuerza sin norma alguna ni orden en sus acciones. Puede reaccionar en forma totalmente incoherente. Las palabras son inconscientemente dichas y puede llegar a extremos en que hasta la figura de la persona se transforme.
Dice Al-Gazali, la Misericordia de Allah sea con él, que lo más atroz no es eso, lo más horrible es lo interior, no lo exterior, porque lo que incita a la ira y el enojo extremo sin autocontrol, es peor aún de lo que se ve por afuera. El que cae en la ira sin dominio, es de aquellos que en seguida emprenden con los insultos, las palabras obscenas que avergüenzan a la persona que tiene juicio. Y el texto agrega algo que se refiere a la lengua árabe más especialmente, alteran la gramática y perturban la dicción. Como la lengua árabe es muy precisa, sucede así cuando la persona está hablando en forma popular, pero más sucede cuando uno está diciendo cosa sin autodominio. Lógicamente, los extremos de la ira incontrolada son la agresión, la violencia, el romper, destrozar, matar o herir, y no solamente se limita a la persona que se le opone, sino que se puede hacer daño a sí mismo. Puede romper su ropa, golpearse a sí mismo, inclusive golpear a cosas inanimadas, como una máquina; si se pone nervioso arreglando una máquina, la puede golpear, insulta a los animales, o al coche, o al motor, patea a un animal si ve que le pasa por delante, es decir se pone en el la posición de una persona que no tiene absolutamente razón. Entonces, conociendo nosotros estos detalles de la ira, cuando surja ese tipo de conducta externa, que nacen todas de la falta de autocontrol, de autodominio de sí mismo y que sabemos por experiencia propia que se debe a una fuerza satánica que se apodera de nosotros, tratemos de superar ese estado. Debemos evitarlo en todo lo posible, ese hecho. Dijo el Profeta (BPDyC): "El que tenga ira (refiriéndose a la falta de autocontrol) y esté parado, que se siente, y si está sentado, que se acueste". Tal remedio es por lo menos un acto conciente, que ya supera la inconciencia del momento de la ira excesiva.
Los signos internos son aún más malignos. Vamos a comentarlos en parte hoy y en parte más adelante. En el corazón del hombre se evidencia en el momento de la ira el rencor, la envidia. El abrigar maldad contra la gente, es decir querer hacerles mal y esperar la oportunidad de hacerlo. El alegrarse del mal ajeno y entristecerse por su alegría, el empeñarse en divulgar los secretos y estar espiando las intimidades de la gente, el burlarse de otro y demás maldades por el estilo, este en realidad es el estado interior, todavía más atroz, horrible y pernicioso que el estado exterior que se evidencia y que ya de por si es malo.
En el Islam nos acostumbramos, a superar el rencor mediante el perdón y la misericordia, tratando de comprender al otro y tratando de olvidar el mal que nos hicieron, o la ofensa de que fuimos objeto por parte de ellos. El Profeta (BPDyC) dijo: "Si tu hermano espiritual te hace algún daño, busca setenta excusas o justificaciones para él." Y Jesús (P.) dijo: "Si tu hermano espiritual te golpea en una mejilla, ofrécele la otra". Esto último no vale para los impíos y los hipócritas, como falsamente se lo entiende por parte de los que están dando cachetazos a la gente, y dicen eso para no ser objeto de algún cachetazo de la gente.
La envidia es otra de las cosas que produce ira. Si uno tiene envidia de otro, como ya lo hemos tratado en otras disertaciones, entonces tiene una buena predisposición para atacarlo. Yo podría citar también a la discriminación, que Al-Gazali no tuvo en cuenta debido a que en el Islam prácticamente está muy atenuada, pero en occidente es muy pronunciada; algunas personas si saben que uno es hijo de árabe lo discriminan, si es musulmán, peor aún, debido a que reaccionan naturalmente con ideas antiguas como las que vienen de España, las que vienen de Italia, contra los árabes y contra los musulmanes. Lo mismo sucede con los judíos, pero éstos tienen la ventaja de un altavoz y cada vez que le pisan un dedito, gritan por el altavoz y los escucha todo el mundo. Los árabes no y deben sufrir muchas ofensas de la gente, inclusive decir ofensivamente "turco", en el sentido de despreciar a la persona. Pero ojala muchos pueblos de occidente fueran como los turcos. Este clima de enemistad antigua generó toda una serie de prejuicios y maldades, que todavía se transmiten en la sociedad occidental contra todo lo que sea árabe o islámico. Sino fíjense en la prensa occidental, las dos medidas que tiene, una cuando se trata de Israel, por ejemplo, entonces todo es comprensible, es comprensible que se mate a la gente, es comprensible el genocidio. Es comprensible todo basta que tenga el sello "made in Israel". Pero ¡cuidado con lo que hacen los palestinos para defenderse, porque ellos deben soportar todo y no serán tolerados! ¡Cuidado con lo que se hace en Libia, si Libia se defiende contra los Estados Unidos! 'Cuidado con lo que hacen los iranios, porque son musulmanes, si bien no son árabes, porque los iranios si hacen una reorganización de su nación, son unos salvajes! etc. Entonces continuamente se puede aceptar la aberración más grande, como que la ley inglesa aprueba el casamiento entre dos hombres, homosexuales, pero ¡cuidado que el Islam diga que el adulterio está mal y que castigue a los adúlteros, porque eso es salvajismo!, ¿donde está el salvajismo?
El abrigar maldad contra la gente, el alegrarse del mal ajeno y entristecerse de la alegría que tienen los otros, el desear su mal, son entonces base para la ira excesiva y maligna. Pero hay algo en que el musulmán no debe caer: el empeño en divulgar los secretos y en desvelar las intimidades de la gente, sobre todo no se debe hablar de las mujeres y menos si las mujeres son musulmanas. Inclusive si tienen mala conducta, se debe silenciar eso, algo que la sociedad occidental corrupta está muy acostumbrada a divulgar. El honor de las mujeres está en boca de la gente, continuamente están buscando chismes y los van corriendo de boca a oído continuamente, como el veneno para denigrar a las mujeres. Ual Hamdu lil-Lahi rabbil Alamin ua bihi nastain...
Sagrado Corán
Dice el Sagrado Corán lo siguiente: "¡Creyentes! 'Creed en Allah y en Su Mensajero y en la Escritura, (el Sagrado Corán), que El, (Allah), reveló a Su Mensajero y la Escritura que El reveló anteriormente, (las escrituras antiguas)! Aquel que reniegue de Allah, Sus ángeles, Sus escrituras, Sus Mensajeros y el Día Final, habrá errado manifiestamente. A los que hayan creído y luego renegado, luego creído y luego renegado, y luego aumentado en impiedad, Allah no los perdonará en absoluto, ni los guiará por ningún sendero (recto). Anuncia a los hipócritas que tendrán un penosísimo castigo. Los que toman a los impíos como amigos íntimos, fuera de los creyentes ¿acaso quieren participar de su poder? Sabed que el Poder todo pertenece a Allah. Y os ha revelado en el Libro, (el Corán), que cuando vosotros oyerais que son denigrados los Signos de Allah, (o los versículos del Sagrado Corán), y se burlan de ellos, no permanezcáis sentados con esa gente hasta que ellos se ocupen de otra conversación, sino seríais como ellos. Por cierto que Allah reunirá a los hipócritas y a los impíos en el Ardentísimo, a todos ellos." Ual Hamdu lil-Lahi Rabbil 'Alamin ua bihi Nastain... La Alabanza sea con Allah Señor de los Universos y a El nos encomendamos, la bendición y la paz y las gracias sean con Muhammad y su Descendencia Purificada y con los Mensajeros y Profetas que le precedieron y con sus descendencias purificadas.
Siervos de Allah, exaltemos a Allah y bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos a Allah en este día de congregación, en que todos los musulmanes del mundo asisten a la oración del Yumu'ah, de la congregación, y en que en diversos momentos de este día es elevada la oración y es dicha la disertación, en que Allah abre las puertas de los cielos para los creyentes y las del infierno para los impíos, en que Allah Ta'ala hace que los musulmanes conmemoren la creación de Adán, el descenso de los Libros sagrados y la venida del Mahdi (P.), y en que será constituido el Juicio Final, el día viernes, siervos de Allah, en este día tan importante, exaltemos a Allah y bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos a Allah, la Bendición, la Misericordia, la Indulgencia. Encomendemos a Allah todos nuestros asuntos, pidamos Su auxilio, Su ayuda, poder de Su Poder, fuerza de Su Fuerza, tanto como para llegar a Su Complacencia, y en tanto no nos perjudique. Allahumma, danos el Perdón, pero antes demos nosotros las gracias porque sin dar las gracias, no es aceptado el pedido de perdón, Demos las gracias a Allah, por todos los bienes, todas la bendiciones, todos los bienes que El nos otorga, todos los conocimientos, las purificaciones, las inspiraciones, las ocurrencias que Allah nos inspira instantáneamente sobre algo que el quiera desvelarnos. Siervos de Allah bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos a Allah con los verbos imperativos, diciendo: "Dame", "Concédeme" "Otórgame", porque ese es el secreto del Du'ah, la utilización de los verbos imperativos. Se comienza por la alabanza a Allah, la bendición al Profeta (BPDyC), el agradecimiento, el pedido de Indulgencia, y después, recién después, lo que uno quiera pedir. Vuelvo a repetir, exaltar a Allah y alabarlo, bendecir al Profeta (BPDyC), agradecer los dones, los bienes que nos da Allah Ta'ala, pedir con verbos imperativos el perdón, por nuestras maldades, nuestros pecados, y todos nuestros actos malignos y después pedir aquello que inquieta el alma en ese momento. Ese es el orden que deben utilizar, bendiciendo al Profeta en el medio y al final de cada súplica, con él sean la Bendición y la Paz y con su descendencia. Y pidamos para la comunidad del Profeta (BPDyC), la fuerza, el poderío en el mundo y en el más allá, los buenos conductores, que Allah derrote a quienes quieren derrotarla. Que Allah la fortalezca cuando es agredida, que Allah rechacé por las armas de los musulmanes la agresión de los lugartenientes de Satanás, que ejercen la violencia contra los humildes. Pidámosle a Allah Ta'ala por la bendición al Profeta (BPDyC, que provea a todo musulmán necesitado, que le de salud a los musulmanes que están enfermos, que le de la Misericordia y el Perdón a los que mueren en este día, que les predestine el mayor bien, en este mundo, a los que en este día nacen, que proteja a aquellos que estamos en la mitad de nuestra vida o la hemos pasado, que nos perdone nuestros pecados de la juventud y de los días en que éramos inconscientes del Islam, que Allah Ta'ala nos otorgue, la Bendición, la Misericordia y la Indulgencia para el resto de la humanidad que le otorgue la buena guía, que otorgue paz al mundo, que de a nuestro país buenos dirigentes, o conduzcan al país hacia el Islam. Pidámosle a Allah Ta'ala, que en este país se difunda el Islam y que nosotros seamos puentes de esa difusión que sirvamos como portavoces del Sagrado Corán, de la palabra de Allah, que nos otorgue la posibilidad, la potencia, el poder, la fuerza, la disposición, el éxito de lograr traducir, difundir, hablar, actuar, y realizar todo aquello que sirva para que el Islam se implante en este país. Pidamos, bendiciendo al Profeta (BPDyC) y su Descendencia, pidamos ser los auxiliares del Mahdí, el Restaurador, cuando el llegue, con él sea la Paz, que Allah apresure su venida, y facilite los medios, de su éxito. Pidamos estar entre su ejército, aquellos que eliminarán la maldad y el pecado del mundo. Bendigamos al Profeta (BPDyC) y pidamos por nuestra comunidad, que Allah la eleve, la engrandezca, la afirme, la expanda y que haga de ella, como dice el Sagrado Corán, sobre la planta que representa al creyente, que se afirma sobre sus raíces, que crece vigorosa sobre su tronco y da ramas abundantes y frutos excelentes. Pidámosle a Allah Ta'ala que haga de nuestra Yam'ah como dice el ejemplo, Bendigamos al Profeta (BPDyC). Y pidámosle a Allah Ta'ala para cada uno de los miembros de nuestra comunidad la Bendición, la Misericordia, la Indulgencia, la protección, la provisión abundante en este mundo y en el otro y que le de a cada uno el anhelo de su corazón, lo que íntimamente procura desde la pureza de su corazón, desde la pureza de la intención. Pidámosle también la pureza de intención para cada uno de nosotros y para nuestra familia, nuestros descendientes, nuestros hijos, nuestros ascendientes, nuestros ancestros, pidámosle la Misericordia, el Perdón, la Bendición, y para nuestras moradas, nuestro trabajo, para todo lo que realicemos, pidámosle el éxito, que sea de Su Complacencia, que nos dirija hacia el bien, que nos inspire las palabras y los actos. Siervos de Allah, rueguen a Allah por aquello que más necesiten espiritual y materialmente, rueguen a Allah, poniendo en las manos de Allah todos sus asuntos, porque si creen que tienen algún poder sobre sus asuntos están liquidados, están en las manos de Satanás. Aún sabiendo que lo que hacen están dentro de sus posibilidades, que son capaces para hacer aquello que están haciendo, pónganlo en la mano de Allah, como si fueran incapaces, como si no tuvieran ninguna posibilidad, porque todo Poder y toda Fuerza proviene de Allah solamente, y lo debemos reconocer, y debemos de El pedir todo bien. Siervos de Allah, rueguen a Allah, bendiciendo al Profeta (BPDyC) por el Murshid, por la Yam'ah, por los trabajos personales, por la familia, por los ascendientes y los descendientes. Subhanna...
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